Presidente CNC: Chile en deuda con su comercio exterior
Valparaíso y San Antonio tienen copada su capacidad máxima. Y lo más preocupante es que se proyecta que de aquí a 15 años las cargas se duplicarán.
Chile es una economía abierta al mundo. Nuestro comercio exterior se ha cuadruplicado en la última década, representando más del 60% del PIB, lo que releva la incidencia que tiene en el desafío de dar un salto cualitativo al desarrollo.
La apertura económica, de cara a un mundo globalizado, nos ha dado créditos, pero también ha impuesto desafíos. Si bien seguimos siendo competitivos a nivel regional, la posición de liderazgo que ostentábamos hace unos años empieza a verse amenazada por el avance de otros países como Perú y Colombia.
Ello es parte del análisis de «De lo macro a lo micro: propuestas para mejorar la eficiencia internacional», estudio que como CNC encargamos a la Facultad de Economía y Negocios de la U. de Chile, para elaborar un diagnóstico de las principales trabas que dificultan un mejor desarrollo de nuestras relaciones comerciales.
No podemos bajar los brazos, pues se requiere seguir avanzando. Y así lo demuestra el que las exportaciones de Chile aún no son tan relevantes en nuestra economía como en los países OCDE. A partir de 2008 han crecido menos que el desarrollo de la economía chilena. En 2013, de hecho, cayeron 29,5%.
El valor de este estudio está en dar cuenta de cómo podemos hacer un upgrade y ponernos a la altura de lo que nos exige la economía global. Y es que en nuestro sistema existen ocho debilidades, todas con un denominador común: la falta de una institucionalidad en materia de comercio exterior. Hay al menos 26 organismos que participan en el comercio exterior, varios de los cuales emiten autorizaciones y certificaciones, sin que exista una directriz estratégica que haga más eficiente el proceso. Esto se suma a la ausencia de una política de comercio con países fronterizos; a la necesidad de una mejor política portuaria, de transporte y logística; a la existencia de trabas paraancelarias (obstáculos que pueden a través de leyes o regulaciones restringir el acceso de productos importados al mercado); y al déficit de infraestructura.
Sir ir más lejos en este informe se advierte que Valparaíso y San Antonio tienen copada su capacidad máxima. Y lo más preocupante es que se proyecta que de aquí a 15 años las cargas se duplicarán, haciendo urgente el desarrollo de inversiones para evitar el colapso del sistema.
¿Cómo generar, entonces, una política de comercio exterior que nos permita alcanzar el desarrollo?¿Dónde deben estar los énfasis para mejorar la competitividad?
Es necesario partir por generar una nueva institucionalidad que aglutine a todos los actores. Pero esta medida no resuelve el problema por sí sola. Se tiene que incrementar la coordinación al interior del propio Estado, fortaleciendo su vinculación con el sector privado a través de marcos regulatorios que armonicen conceptos como planificación, ejecución y fiscalización de las operaciones. El estudio lo resume: un plan maestro exitoso tiene que abordar temáticas asociadas a productividad, competitividad, infraestructura, transporte, medio ambiente, tecnologías de información, innovación y desarrollo. Para generar un cambio es vital que exista una capacidad resolutiva y un mandato claro del Poder Ejecutivo y así lograr que Chile más temprano que tarde alcance el ansiado desarrollo.
Columna del Presidente CNC, Ricardo Mewes en el Diario Financiero.