• En la instancia se trataron diversos temas de preocupación de la industria, como, por ejemplo, el aumento de la delincuencia que afecta a los turistas, la poca promoción de los destinos turísticos de Chile y la falta de energías alternativas.

Con la finalidad de conocer las áreas de trabajo y las problemáticas que actualmente se encuentra enfrentando el gremio, es que la Cámara Nacional de Comercio sostuvo una reunión con la Asociación Chilena de Líneas Aéreas (ACHILA), entidad que agrupa a las más importantes aerolíneas nacionales y extranjeras, representando más del 90% del tráfico internacional de pasajeros y carga. En la instancia, participaron el presidente de la CNC, Ricardo Mewes; los directores Tomás Sahli y Cynthia Perisic; la gerente gremial, Muriel Sciaraffia y la gerente de Estudios, Bernardita Silva y por parte de ACHILA, el presidente del gremio, Estuardo Ortiz; su vicepresidente, Juan José Tohá y la secretaria general, Carolina Simonetti.

En la oportunidad, con respecto a la industria aeronáutica, el gremio comentó que después de la pandemia salió fortalecido, que han estado trabajando intensamente y que han logrado posicionarse y que cuando empezaron a disminuir las restricciones del mercado la industria comenzó a mejorar. También señalaron que existe una recuperación en los vuelos domésticos de un 87% y que en el área internacional se está avanzando poco a poco.

Al mismo tiempo, manifestaron su preocupación por la situación actual en que se encuentra el turismo en nuestro país, cómo recuperar el orden y la seguridad, junto con la cultura cívica. Dentro de este tema se comentó el aumento de los asaltos hacia los turistas, donde hoy día hay grupos organizados que los atacan.

Por otra parte, los representantes gremiales se refirieron a la promoción de Chile, ya que, a su juicio, faltan acciones en ese eje, donde hay que concentrarse en algunas ciudades, ya que la gente no visita países, sino que visita destinos.  Se mencionaron los casos de Perú y Colombia, donde el gobierno pone dinero en los anuncios y en que los programas estén bien establecidos y se señaló que por ejemplo en Chile, no hay un Ministerio de Turismo. A pesar de ello, indicaron que las perspectivas para el verano son auspiciosas y que hay una oportunidad de promover el turismo receptivo en Chile. Dentro de la misma línea se planteó que no hay gobernanza en Chile, que la política de turismo no existe de manera coherente, ya que no se ha formulado una estrategia con destinos únicos e irrepetibles, como, por ejemplo, Torres del Paine o San Pedro de Atacama y que eso generaría un impacto en el empleo y en el comercio.

En la instancia también se planteó que el riesgo país ha subido y que el próximo año se viene complicado para Chile pero que en 2024 se espera una recuperación. En la oportunidad, se señaló que la agenda público-privada está muy alineada con la del Gobierno, ya que el tema de turismo considera temas medioambientales, de género y de regionalización, que generan beneficio social y por lo tanto podría hacer mucho sentido en las autoridades.

Finalmente, se planteó el gran desafío que tiene la industria de la aviación, el de generar energías alternativas y que el gremio asumió un compromiso del carbono neutralidad al año 2050, pero señalan que en Chile existe una legislación que grava las emisiones y que la ley marco de cambio climático es buena, pero muy exigente.  En paralelo está la reforma tributaria y el impuesto verde, entonces indicaron que es difícil hacer este proceso de transición sin reglas claras y sin estabilidad en materia de cambio climático.