La Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Chile hace presente su más absoluta condena a la violencia que se vivió este fin de semana en el ataque incendiario en Carahue. Adherimos de esta forma, al llamado de tantas otras organizaciones de la sociedad civil para que el gobierno inicie una acción decidida que tienda reales puentes de diálogo, garantice el respeto al Estado de Derecho y que, al mismo tiempo, castigue a los responsables de tan graves delitos.

Como si ya no fuera suficiente con los efectos económicos que supone más de un año de pandemia, el clima de temor que se vive en la región afecta de manera directa el trabajo de miles de empresarios: ciudadanos que desarrollan sus emprendimientos bajo la constante incertidumbre de ser las próximas víctimas de la violencia de grupos armados.

Aprovechamos esta instancia para respaldar la labor de protección desarrollada por Carabineros, quienes deben por mandato de la ley garantizar la seguridad de las comunidades, poniendo, muchas veces, su propia vida en riesgo para preservar aquello.

El respeto por la vida ha de ser un valor fundamental, que no haga distinciones entre comuneros, carabineros y empresarios. Como CNC y desde nuestro ámbito de acción, nos ponemos a disposición en pos de un diálogo efectivo que devuelva a los emprendedores de la región y a la población en general, esa tan anhelada paz que proporcione los espacios para el desarrollo y el crecimiento de la región.